La maravillosa tarea de un padre comienza cuando tenemos por primera vez ese pequeño ser entre nuestros brazos, con ello viene una gran responsabilidad y satisfacción que no culminará nunca mientras vivamos.
En ese proceso los adultos aparte de ser
padres comienzan un nuevo rol que es el ser maestro y guía para es@ niñ@.
Ahora nos preguntamos: ¿Qué hacer y qué no
hacer para con nuestros pequeños alumnos?, laguíajuvenil.com nos dice cómo
comportarnos.
Que hacer:
Concentrarse en lo positivo: Haga notar y aprecie
el comportamiento positivo del pequeño, esas contantes afirmaciones y
señalamientos influirán en el niño o joven y afianzaran que esa es la aptitud deseada
por usted.
Dar
el ejemplo: Los niños y jóvenes imitan a sus padres, lo mejor es dar el ejemplo en la casa. Si
usted quiere que los más pequeños colaboren con las labores del hogar es bueno
que usted de el ejemplo.
Reconozca sus propios errores: Su hijo
necesita saber que usted también comete errores pero que usted actúa de una
manera responsable para corregirlos.
Preocúpese por él y escúchelo: Una mera
conversación puede ser el inicio para establecer una conexión con los niños y jóvenes.
Pregúntele como le fue en el día, como
estuvo la escuela, como se siente y cualquier otra cosa que para él pueda ser importante,
pero mucho más importante es escucharlos y que sientan que se preocupa por sus
problemas. Esta es la manera más fácil de crear nexos fuertes y confiables.
Establezca reglas realistas: Estamos claros
que siempre deben existir reglas que hay que cumplir en casa, todas esas reglas
son necesarias para una convivencia agradable por ambas partes pero no siempre
hay que ser tan estrictos a la hora de cumplirlas a cabalidad. Permítase ser
flexible algunas veces bien sea para
premiar algún comportamiento positivo de su hijo o simplemente para generar
confianza y darle incentivos de vez en cuando.
Que no hacer:
Crítico: La crítica señala los aspectos
negativos de un comportamiento, no es bueno ver el lado negativo de las cosas,
todas las personas tienen derecho a equivocarse ya que eso forma parte del
proceso de aprendizaje que tiene un niño o adolescente. Si va a criticar utilice
la crítica constructiva.
Contradecirse: Si va a decir algo sea firme
en ello, decir una cosa y hacer otra no es ser consistente en la forma de
actuar. Esta aptitud puede ser tomada como una hipocresía por parte de usted.
De igual manera sucede con su pareja, los padre deben conformar un equipo que
tiene como finalidad enseñar al niño, por lo que no es recomendable
contradecirse uno al otro para no crear confusión.
Ser indiferente: Usted debe estar siempre
atento a los cambios de humor y comportamiento de los niños y jóvenes de la
casa, este puede ser el reflejo de que algo no esté bien y usted estaría ignorando
un potencial problema.
Por: Alejandro Siú Rojas



